El presidente Miguel Díaz-Canel calificó este lunes de vergonzoso el próximo paso anunciado en la campaña de Estados Unidos contra Cuba, que busca imponer una reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Según escribió en su cuenta oficial en Twitter el mandatario cubano, ‘el desprestigiado ministerio de colonias yanqui es llamado a jugar su triste papel de lacayo’, en un ‘macabro plan’ dirigido a la nación caribeña.
La víspera, en un tuit, el ministro de Relaciones Exteriores de la isla, Bruno Rodríguez, recordó que la OEA siempre ha estado al servicio de Washington y apoya todos sus intentos de aislamiento, intervenciones militares y golpes de Estado en la región.
De acuerdo con autoridades, la nación caribeña está bajo una intensa campaña de mentiras, guerra mediática e incitación a la violencia, instigada y financiada desde suelo norteño, para estimular intentos de desestabilización.
Este lunes, Rodríguez emplazó al Gobierno estadounidense a presentar pruebas que demuestren las ‘calumniosas acusaciones’ que levanta contra La Habana.
El canciller aseguró que las declaraciones del secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, en las que habla de supuestos arrestos y detenciones masivas, no tienen fundamento, y ‘se basan en el apoyo de un puñado de países que han sido presionados para acatar sus dictados’.
El jefe de la diplomacia denunció las presiones extremas de Washington sobre otros gobiernos, con el fin de comprometerlos en una declaración.
Luego de una semana de calumnias increíbles, la Casa Blanca solo logró sumar a 19 países en el documento, y el Departamento de Estado norteamericano debería estar avergonzado por ese descrédito, enfatizó.
Recientemente, el titular reafirmó que en la nación no hubo un acto de represión contra el pueblo, como tampoco existió un estallido social el pasado 11 de julio, y rechazó las calumnias difundidas en medios de prensa internacionales al respecto, así como las tergiversaciones en las redes digitales.
(Tomado de Prensa Latina).