El camagüeyano Julio César La Cruz, de los 91 kilogramos (kg), volvió a mostrarse indescifrable sobre un cuadrilátero de boxeo y se coronó campeón olímpico en Tokio, al vencer al ruso Muslim Gadzhimagomedov, para darle a Cuba su sexta medalla de oro en estos Juegos.
Campeón olímpico de Río de Janeiro 2016 de los 81 kg y cuatro veces titular mundial, La Cruz exhibió una velocidad, esquiva, reflejos y preparación física envidiables en la pelea, para llevarse decisión unánime de los jueces.
Con la guardia baja y un estilo de combate poco convencional, el púgil hizo honor a su sobrenombre de «La Sombra» para dominar inobjetablemente a Gadzhimagomedov, monarca del orbe en 2019 y que llegó con el aval de ser el primero en el ranking de la temporada.
El camagüeyano de 31 años logró así la tercera medalla de oro del boxeo para Cuba, con títulos también de Rosniel Iglesias y Arlen López, y ya sobrecumplió los vaticinios precompetencia.
Todavía la disciplina tiene otra oportunidad de aportar otra presea dorada, con el matancero Andy Cruz, quien combatirá este domingo en la final de los 63 kilogramos contra el norteamericano Keyshawn Davis.
La Cruz no dejó dudas en sus actuaciones en la división superpesada dirimida en el coliseo Arena Kokugikan, y demostró su calidad con las victorias sobre el keniano Elly Ochola (5-0), el español Enmanuel Reyes (4-1) y el brasileño Abner Teixeira (4-1).
Haciendo su habitual saludo militar al grupo de cubanos presente en la sala, el Capitán del equipo nacional Domadores proclamó: Cumplimos Cuba.
Oficialmente, la nación antillana ostenta en Tokio seis medallas de oro, tres de plata y cuatro de bronce, que la posicionan en el lugar 13 en el medallero por naciones.
Con esta victoria, el boxeo, “buque insignia” del deporte cubano, acumula 40 de las 83 preseas de oro de la mayor de las Antillas en Juegos Olímpicos.
(Tomado de ACN).
