La presidencia de Joe Biden generó expectativas sobre un cambio de política de Estados Unidos hacia Cuba, pero hasta la actualidad implementó una línea más dura que su predecesor, Donald Trump, afirmó el diario The New York Times.
Según el trabajo periodístico titulado ‘Es decepcionante: cubanos critican la estrategia de Biden’, el mandato del demócrata apuntaba, para muchos, a un regreso a la época de Barack Obama (en su última etapa).
Recordó que Obama buscó enterrar el último vestigio de la Guerra Fría al restablecer las relaciones diplomáticas con Cuba y pedir el fin del embargo (bloqueo), una política que, aunque no lo dijo el periódico, el propio mandatario admitió que había fracasado.
‘En cambio, Biden está implementando una línea más dura con Cuba que su predecesor, el expresidente Donald Trump, quien endureció las restricciones a los viajes y las transacciones financieras’, enfatizó el texto.
Añadió que para muchos cubanos que habían visto la elección de un presidente demócrata como un motivo para regresar a la normalización de las relaciones, con más vuelos a la isla y más canales para enviar dinero en efectivo, medicinas y alimentos a sus seres queridos, el enfoque de Biden (que mantiene vigentes las 243 medidas coercitivas de Trump) ha sido un golpe duro.
El artículo comentó que tras los disturbios del 11 de julio en la isla la Casa Blanca –que lleva casi siete meses estudiando su política hacia el país caribeño- convirtió el tema en una prioridad de su agenda exterior e ‘impuso nuevas sanciones contra funcionarios cubanos en las últimas semanas’.
Además, acotó que Biden pidió a expertos del gobierno que elaboren planes para que Estados Unidos amplíe de manera unilateral el acceso a Internet en Cuba y se comprometió a incrementar el apoyo a los llamados disidentes, acciones que el Gobierno de La Habana denunció como actos de injerencia.
Los autores del trabajo plantearon que no pocos esperaban que Biden y su homólogo cubano, el presidente Miguel Díaz-Canel, tomaran medidas ‘para volver al lento y vacilante proceso de normalización de las relaciones’.
El artículo no lo incluyó, pero Cuba siempre ha expresado su disposición al diálogo sin condicionamientos con Estados Unidos bajo el respeto de las diferencias y la soberanía, y sin ceder en principios.
Fue así como el 17 de diciembre de 2014 en un anuncio simultáneo los presidentes Raúl Castro y Barack Obama, dieron a conocer el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre los dos países, rotas de forma unilateral por Estados Unidos el 3 de enero de 1961.
En sus palabras, el entonces ocupante del Despacho Oval reconoció el fracaso de la política de bloqueo económico, financiero y comercial contra Cuba y la necesidad de realizar un cambio en este sentido.
(Tomado de Prensa Latina)