La semana que concluyó puede calificarse de intensa al describir las jornadas del Grupo Temporal de Trabajo de La Habana (GTT) presidido por Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido en la capital y el Gobernador Reinaldo García Zapata, en las cuales examinaron la situación de la provincia ante el incremento de los contagios debido a la alta transmisión de la cepa Delta de la pandemia COVID-19.
En el GTT provincial enfatizó que el ámbito intradomiciliario constituye el escenario de mayor transmisión, por lo cual se precisa del apoyo de los grupos de trabajo creados a nivel de circunscripción e integrados por los delegados, administrativos y demás actores de la comunidad, que tienen que desempeñar el rol para el que fueron concebidos.
En relación con las disponibilidades de oxígeno, Torres Iríbar subrayó que es necesario tener un control riguroso de su consumo y enfatizó evitar el derroche del vital recurso y mucho menos el desvío, pues lo principal es garantizar su existencia en los centros asistenciales médicos.
El doctor Emilio Delgado Iznaga, director provincial de Salud de La Habana, informó que llegaron 74 concentradores de oxígeno que van a ayudar a reducir el consumo de balas de oxígeno en varios hospitales del país. Igualmente señaló que estos permitirán dar servicio a consumidores que tienen oxígeno en sus casas.
Luis Antonio Torres Iríbar recordó el llamado realizado por el Presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, sobre la necesidad de que la población comprenda la importancia de mantener el distanciamiento en estos momentos, sin que ello implique perder la familiaridad que caracteriza a los cubanos. De igual forma, insistió trabajar en los barrios, aumentar el pesquisaje y que los factores actúen como es debido.
Otro aspecto abordado fueron las visitas a barrios y comunidades de la ciudad por parte de las máximas autoridades partidistas y gubernamentales, sobre todo, en aquellos más humildes y en los cuales se realiza una transformación que responde a exigencias planteadas por sus pobladores. También se analizó la marcha de la vacunación de las personas que por diversos motivos aún no han sido inmunizadas en la capital. Todo lo anterior muestra que en La Habana se trabaja con fuerza para lograr, en el menor tiempo posible, poner freno a la pandemia de la COVID-19.
(Tomado de Tribuna de La Habana)