Por Rafaela Balanza
Fotos: Tomadas del Portal de la Televión Cubana y Cubasí
Cuando me encontré por primera vez con el programa A Raja Tablas, de Canal Habana, lo primero que me atrapó fue la ambientación teatral del reducido set y la iluminación, sugiriendo camaradería en la conversación que se avecinaba.
Luego no pude apartarme de la pantalla, Gretel Cazón como entrevistadora era excelente. Preguntas inteligentes, hechas de la manera delicada y respetuosa que la caracteriza y el entrevistado se veía feliz al responder, incluso sobre aspectos de su vida que nunca antes había dicho en público. Estaba claro que hubo suficiente investigación y trabajo de mesa con el equipo.
Y cuanta fue mi sorpresa al ver en los créditos del programa que la idea, el guion y la dirección eran de la propia actriz e intérprete, la llame para felicitarla y conocí de otros detalles:
«Este programa nace en plena pandemia, presenté el proyecto y me lo aprobaron, lo hacemos con mucho amor, con esfuerzo, con una cuota inmensa de deseos de hacer. Imagínate que el set se monta en mi casa, sin apenas recursos, tengo que prepararme mucho porque no tengo asistente de dirección, así que el equipo tiene que estar bien claro de todo lo que va a pasar mientras entrevisto».
Cuando vi una segunda propuesta aprecié mejor la presentación que tiene una música icónica de Martha Valdés, supe de la sección Memorias emotivas, homenaje a los que ya no están y fueron imprescindibles para el teatro, la televisión, la radio, el cine cubano.
Luego continúe confirmando que los testimonios llegaban al alma de los televidentes, la entrevista no da cabida a la superficialidad, se aprovecha cada segundo y la Cazón muestra dominio de las especialidades que ejecuta simultáneamente.
«El actor es una figura que yo respeto mucho, todos hemos pasado dificultades para conseguir nuestros sueños, hacemos sacrificios, tenemos alegrías, pero también frustraciones; somos como cualquier ser humano, así quiero que los vean», asegura Gretel.
El espacio también tiene la sección Descarga. Casi siempre aparece en los minutos finales y en ella el invitado vuelve a ser actor o actriz, en breve tiempo, hace un monólogo, lee un poema, canta.
«Me siento realizada, contenta, pero muy comprometida con los televidentes que llaman, escriben pidiendo a invitados específicos, también hay colegas que quieren venir al programa. Estamos transmitiendo la segunda temporada y por lo que veo habrá una tercera», agrega.
A Raja Tablas cumple totalmente su objetivo: visibilizar figuras de las artes escénicas cubanas. Con cada entrega hace una reverencia al mundo de la actuación y yo, al igual que miles de televidentes, lo sigo esperando los lunes a las 7:30 de la noche y los sábados a las 8:30, en retransmisión.