Al margen de dificultades económicas apremiantes, el Barrio Chino de La Habana se llenó de colorido y de las esperanzas que trae el Nuevo Año Lunar (del Conejo), tal y como lo consideran hoy organizadores.
Se trata de la Fiesta de la Primavera del Nuevo Año Lunar Chino 2023 (21 al 27 de enero, el año comenzó propiamente el día 22), celebraciones con amplio programa, contrastadas con las que se realizan en el resto del mundo, incluido el país asiático, donde platillos novedosos y tradicionales se suman a los encuentros y agasajos.
Aquí, el eje está en bailes, en trajes que cada cual se prepara como puede y en una amplia tradición del Barrio Chino, sobre todo a partir de los esfuerzos del profesor y director de la Escuela Cubana de Wushu, Roberto Vargas Lee.
En esa parte de la capital cubana, se pudo apreciar el 21 de enero un conjunto de practicantes del Tai chí y otras modalidades chinas, en un conjunto de niños, jóvenes y ancianos, sobre todo muchas mujeres por encima de los 65 años de edad.
El entusiasmo apreciado por este periodista rivalizó con el pequeño espacio, abarrotado de público, del eje del propio Barrio Chino, el cuchillo de las calles Zanja y Dragones, en el municipio de Centro Habana, donde incluso estuvo presente el simbólico Dragón chino, colorido, con destaque para el rojo.
Desde el 14 de enero y más allá del día 22 (eje de la celebración) esa parte de Cuba tiene programados encuentros de diversos tipos respecto a la efeméride, en la calle Amistad, en la Plaza San Fan Con, con la inauguración de una exposición de bordados, y encuentros de la mano de los estudiantes de chino del Instituto Confucio.
Simbología y misticismo chino: el año del conejo de agua, es otros de los temas mediante una charla de la doctora en ciencias Yorbelis Rosell, junto a un ciclo de cine de esa nación, con un fuerte en las artes marciales.
Voceros del Barrio señalaron que los festejos serán hasta febrero de 2023, con un concurso culinario (fundamentalmente en el área profesional, con chefs y especialistas), la muestra nombrada el Conejo de primavera del artista Alexis Carbonell y muchos programas adicionales.
Todo ello atañe a los descendientes de chinos en Cuba y a estudiantes de ese país como es el caso de Tang Yongyan, de 26 años, pupilo de Antropología en la Universidad de La Habana, de acuerdo con entrevistas realizada por la agencia Xinhua en este país.
Y no solo se trata de un festejo de La Habana, sino que en todo el país se suman quienes de alguna manera están vinculados con China y su cultura. En todo caso, los principales deseos tanto para los locales como extranjeros se resumen en Salud.
El Año Nuevo, también conocido como Año Nuevo Lunar, comienza en la fecha que, desde el este asiático, ocurre la segunda luna nueva luego del solsticio de invierno (21 de diciembre en una parte del mundo), indica la revista estadounidense Farmer’s Almanac. En 2023, corresponde al año 4721 del calendario chino.
Los entendidos señalan que el zodíaco de ese país está representado por animales dentro de un ciclo que se repite cada 12 años, cuando cada uno posee un animal distinto y, según el calendario zodiacal publicado por la revista China Today, el conejo es el animal que representa al 2023.
De acuerdo con ese zodiaco, a las personas nacidas en el año del Conejo les gusta estar cerca de gente cariñosa, complaciente y agradable. Son personas sentimentales, superficiales y exitosas en los negocios, agrega la revista (el animal opuesto al conejo es el Gallo).
Por tanto, les pertenece el festejo propiamente a los nacidos en 1951, 1963, 1975, 1987, 1999, 2011, 2023 y sucesivamente cada 12 años. El 2022 fue representado por el Tigre y, para 2024, el animal que representará el Año Nuevo será el Dragón.
El embajador chino en Cuba, Ma Hui, envió oportunamente desde su sede diplomática en La Habana un mensaje de felicitación a todos los latinoamericanos y chinos de ultramar que residen en la región, debido a tan significativo festejo.
Esa ceremonia aparece en muchos lugares del mundo, como es el destaque en Nueva York, Singapur, Manchester (Reino Unido) , Buenos Aires, Ciudad de México, Venezuela, o La Habana, lugares de fuerte nexo con el gigante asiático y sus tradiciones, donde contra viento y marea se realizan tales coloridos encuentros.
(Tomado de Prensa Latina)
