Con el objetivo de establecer vínculos dentro del gremio de tejedoras, visibilizar las diferentes manifestaciones del tejido, exponer diversos emprendimientos liderados principalmente por mujeres y formar parte de la red de desarrollo y consumo local, mujeres de todas las edades especialistas en el arte de las agujas de La Habana y Mayabeque se reunieron en el Centro Histórico de la capital cubana para celebrar el II Encuentro de Tejedoras.
Este evento nace como una iniciativa de los emprendimientos Chulita teje y Tejidos Leyda y tiene como pilares fundamentales la visibilización y el rescate de la tradición de los hilos y las agujas, como forma de empoderamiento, emprendimiento y proyecto de vida, expuso Karla Dedieu, coordinadora del evento y parte del equipo de Chulita teje.
En esta ocasión participaron una veintena de formas de gestión no estatal en el Museo Casa de la Obrapía, entre trabajadoras por cuenta propia, artistas independientes y proyectos de desarrollo local y familiares.
Mediante el intercambio de opiniones, materiales audiovisuales sobre confecciones y técnicas, el encuentro se propuso también brindar herramientas que permitan la utilización del tejido como forma de esparcimiento, terapia y sostén económico. En esa línea, incluyó una clase para personas que desean iniciarse en el mundo del crochet y el macramé.
A la segunda edición, dijo la también coordinadora del evento, acudieron “varios emprendimientos que no habían estado en el primero, con representaciones de calzado y flores tejidos, así como la técnica miñardí -crochet con gancho-, y tejedoras que primera vez participan en un evento y nunca se habían enfrentado a una feria”.
De acuerdo con Dedieu, el interés por realizar el encuentro en el Museo Casa de la Obra Pía tiene que ver con su tradición con las manualidades, sobre todo textiles, de las que atesora una colección muy importante de textiles antiguos, así como por su trabajo con mujeres en situación de vulnerabilidad.
“Queremos en futuro unirnos al museo para seguir trabajando. Nuestro fin es que las personas empiecen a crecer un poco más el tejido en general y se pueden lograr otras cosas”, dijo la creadora de Tejidos Leyda.
(Tomado de Tribuna de La Habana)