Cada 15 de enero es celebrado el Día de la Ciencia Cubana. La fecha fue instituida en 1990, en coincidencia con el aniversario 30 de que el líder histórico de la Revolución, Fidel Castro Ruz, delineara el papel de una rama de tanto relieve en el desarrollo del país.
«El futuro de nuestra patria tiene que ser necesariamente un futuro de hombres de ciencia, tiene que ser un futuro de hombres de pensamiento (…)», avizoraba el Comandante en Jefe en un histórico discurso del vigésimo aniversario de la Sociedad Espeleológica de Cuba, en 1960.
Como lo reconoció el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel, los científicos de la Mayor de las Antillas han salvado al país de la epidemia, a través del desarrollo de un grupo de inmunógenos y candidatos vacunales, impensables de obtener para cualquier nación subdesarrollada del orbe.
En cada uno de esos aniversarios, el país reconoce los resultados más destacados construidos por las mujeres y los hombres de ciencia, y su celebración en diferentes provincias constituye una muestra de que la triada investigación-desarrollo-innovación no se circunscribe ya a una parcela capitalina. La creación de polos científicos, los indiscutibles logros en la medicina, la salud y la educación, la universalización de la enseñanza, las investigaciones para un adecuado manejo ambiental, la protección de 100% de la población contra los desastres de origen natural y de otros tipos, son únicamente algunos ejemplos de cuanto se ha logrado.
En su honor celebramos este día en que rendimos homenaje a todos los que impulsan el movimiento científico tecnológico como motor impulsor del desarrollo de Cuba.
Llegue a todos ellos nuestra felicitación y reconocimiento por su labor.
Por: Lic. Anabel Quiñones Agüero